La primavera pasada, en Francia, se comenzó a vacunar a millones de personas para protegerlas del coronavirus. Eluiza y Olga recibieron sus dos dosis en mayo y junio. (Olga se apresuró a decirle al médico que la vacuna de Pfizer procedía de su ciudad natal, Kalamazoo, en Michigan, Estados Unidos). Después de un tercer cierre, el país se abrió de nuevo, con un proceso de cuatro etapas basado en el número de casos. En junio se levantaron muchas restricciones para viajar hacia o desde otros países. Poco a poco, la vida vuelve a la normalidad y la gente muestra su agradecimiento con grandes sonrisas.